La vida se defiende con valentía.
Que pueda sanar el alma, de asperezas y quemaduras. Besando con dulzura y calma sus impaciencias y amarguras.
Muerte del alma es la apatía, el vacío, el fastidio y la desolación. Hace falta levantarse con alegría, con coraje, lucha y determinación.
Que salga de esos días inhiestos, donde todo sabe a dolor y amargura. Que cambie el rencor por besos, y transforme la maldad en hermosura.
Que recupere en fin, el alma su lozanía, y dejé atrás el vacío y la perdición. La vida se defiende con valentía, con coraje, con fuerza y con pasión.
+Alfonso G. Miranda Guardiola